miércoles, mayo 21, 2008

Anti-astenia primaveral

La astenia primaveral, es según esa fuente inagotable de sabiduría llamada Wikipedia, una sensación generalizada de debilidad física y psíquica que se traduce en pérdida de apetito, fatiga muscular y psíquica, trastorno del sueño y falta de deseo sexual. Pues bien, a mi me pasa justo lo contrario y es que siempre digo que noto cuando llega esta época, mi cuerpo me dice que los días son más largos (y las ropas más cortas, jeje) y que está preparado para rendir a tope. Llámalo hormona revolucionada, llámalo hervor sanguíneo, llámalo como quieras, pero el caso es que lo siento en mi interior, la primavera ha llegado y ahora mismo está en su pleno apogeo. La astenia no figura dentro de mi vocabulario.

Uno de los síntomas más evidentes de la llegada de la primavera es sin duda que a las nueve de la noche todavía es de día, pero para mí, los olores marcan la estación de las flores. Sigo con la saga del olfato, un sentido que se me agudiza especialmente durante estos meses y que quizá tenga que ver con esa anti-astenia que padezco. Y hay una situación en concreto que me hace sentir incluso que el verano está a punto de llegar.
Hace unos años plantaron en casi todas las calles de mi barrio unos árboles que creo que son de la familia de los sauces (Salicaceae). Todavía no los he identificado, pero me comprometo a que algún día lo haré si es posible. La cuestión es que estos árboles no son demasiado llamativos, quizá su rasgo más distintivo es que el envés de sus hojas es blanquecino y de apariencia plateada. Esto contrasta fuertemente con el tronco que es muy oscuro, casi negro. Pues bién, resulta que cuando las demás plantas de jardines y zonas verdes ya llevan más o menos un mes en flor, cuando parece que la naturaleza no puede dar más de sí, este árbol florece. Y como florece!

Su olor es intenso y profundo, dulce y agradable e impregna el aire de tal modo que parece como si tuvieras una gota de su esencia bajo la nariz. Dicho olor simplemente me transporta al final de la primavera y al principio del verano, un verano que se presenta incierto este año, pero que los últimos ha sido magnífico rodeado de amigos y niños de campamento. Os invito a que os deis un paseo por mi barrio y disfrutéis de los aromas que en él se respiran, como método antiestrés es inigualable. Pero os doy un consejo, no arranquéis las flores de este árbol, porque pierden su olor, ya que como todo en la naturaleza, donde mejor luce sus galas ya sean cromáticas, olfativas o táctiles, es en el lugar donde ha nacido.

3 comentarios:

gringringrinpeace!!! dijo...

A mi también me encanta la primavera y me activa completamente.
Soy incapaz de quedarme en casa!! Con tanto olor, color y calor...
No se quien habrá escrito eso en la wikipedia pero está muy equivocado, al fin y al cabo siempre se ha dicho que...
¡LA PRIMAVERA LA SANGRE ALTERA!!
Por cierto,¿cual es tu barrio?

Unknown dijo...

HORMONAAAAAAAAAAARRRR!!!! AJAJJA
Yo soy victima de la astenia primaveral, pero solo hasta la hora del cafe matutino, eso si, desde que me levanto, hasta que llega el momento de parar de estudiar pa tomar el susodicho café....joder que astenia...
En cuanto a los olores...son las 23:00, ha estado lloviendo toda la tarde y acabo de llegar de dar un paseito...que agradable olor, sobre todo cuando llevo oliendo la celulosa de mis apuntes todo el dia. Además por la zona de la chantria hay unos arbustos de flores blancas que dan lugar finalmente a una especie de gumibayas que ponen la calle hecha una cerdez...pero huelen de vicio, eso si, cuando te encuentras a 200 metros de ellas, si te acercas atufa!!!
En fin, ya me desrrallé un rato, ahora...A LEER LA PROGRAMACIÓN!!!
Besi

Anónimo dijo...

Te espero en Brezo, aunque solo sea de visita.
Besos y mucho ánimo que ya queda poco