Atún rojo
Siempre he pensado que la caza y la pesca bien gestionadas son beneficiosas para los ecosistemas. No sólo contribuyen a regular y controlar la dinámica poblacional de las especies sometidas a presión cinegética, sino que además eliminan individuos enfermos o malheridos. Por otro lado el vil metal es un elemento esencial en este ámbito, ambas actividades mueven mucho dinero y existen numerosas poblaciones que viven a expensas de ellas. Lo bueno es que en dichas poblaciones se da un efecto de retroalimentación positivo en el cual la caza de ciervos (por poner un ejemplo) supone unos ingresos para la gente de los pueblos en concepto de ocupación hotelera, restaurantes y demás (por no hablar de las licencias, mediante las cuales la Administración se embolsa cuantiosas sumas de dinero) Esos ingresos que la caza supone para el pueblo hacen que sus habitantes sean los primeros interesados en conservar el entorno que les rodea para que la caza se mantenga. Llegado este punto he de decir que co...